Entrevista con Nelson Tapia
EL ARQUERO Y SU TIERRA
Camilo Avendaño
A sus 40 años Nelson Tapia colgó definitivamente los guantes para volver a la tierra que lo vio nacer: Molina. Luego de 18 exitosos años como profesional, el “Cabeza de Muela” se dedica a entrenar a los alumnos de 6° año del Instituto San Martín de Curicó y al equipo de fútbol de la Universidad del Mar, sede Curicó.
Poseedor de un excelente achique, fue uno de los mejores arqueros chilenos de los últimos años, y uno de los hombres más representativos del proceso de Nelson Acosta que clasificó al mundial de Francia 98. Actualmente es embajador de las aldeas S.O.S, que ayudan a los niños en situación de pobreza y riesgo social.
Luego de casi dos años de retiro, Nelson Tapia nos habla de su regreso a Molina, al mismo tiempo que comenta la situación actual del fútbol chileno y nos relata sus experiencias como arquero profesional.
_ ¿Por qué volvió a Molina?
_ Desde que salí de Molina fue para volver. Mi anhelo siempre fue volver a tener mi campo, compartir con los amigos de infancia, envejecer en Molina. Era mi idea y se lo plantee muchas veces a mi familia y al final decidieron vivir en Molina.
Mi familia se vino mucho antes. Estuvieron acá siete años antes de que yo volviera. Yo estaba en Argentina o en Colombia, estaba en Brasil o en Calama y mi esposa y mi familia ya estaban acá.
_ ¿Tuvo ofertas para trabajar en clubes profesionales de Santiago o en otros clubes del país?
_ Lo que pasa es que mi familia ya estaba acá y estaba decidido venirnos para Molina. Obviamente de que si hubiera aparecido algo a lo mejor, pero siempre estuvo la idea de volver y por lo menos estar dos o tres años acá. Ahora, si aparece alguna posibilidad arrancaría de nuevo, pero se ve lejana la posibilidad.
_ ¿Pero le hubiera gustado trabajar en un club profesional preparando arqueros o dirigiendo?
_ A mí me gustaría trabajar solamente en la selección.
_ ¿Tuvo siempre claro que seguiría trabajando en el fútbol luego de su retiro como jugador profesional o pensó en algún momento incursionar en otras actividades?
_ Siempre pensé que seguiría trabajando en el fútbol. A mí me gusta el tema de las comunicaciones pero nunca estudié para eso, aparte de que no me han invitado a trabajar en ninguna radio en Santiago o en la región, pero a la larga siempre pensé que seguiría en el fútbol.
_ ¿En qué momento de su carrera decidió dejar el fútbol?
_ Cuando tenía mi último contrato con Universidad Católica en el año 2000. Tenía un contrato que era prorrogable hasta el año 2001, y mi intención era jugar hasta los 35 años. Pero Universidad Católica no hizo uso de ese contrato y me dejó en libertad de acción.
Después de eso me fui a jugar a Argentina y me lesioné, por lo que me dije “tengo que volver”. Me costó mucho recuperarme. Estuve algunos meses en Puerto Montt, me volví a lesionar y estuve 7 meses sin jugar. Volví a Unión Española pero aún no muy recuperado de mi lesión y después se dio la posibilidad de jugar en Cobreloa. Ahí salí campeón dos veces en el mismo año, renové contrato y me reencontré con las ganas de seguir jugando.
Luego de dejar Cobreloa me fui a Brasil y salí campeón nuevamente. Aunque pensé retirarme en Cobreloa, ellos no quisieron extender mi contrato por seis meses más, por lo que me fui a Colombia por seis meses y allá decidí definitivamente retirarme. Con 39 años dije “basta”.
_ ¿Considera que el proceso de Francia 98 fue la mejor época que usted vivió como profesional?
_ Sin lugar a dudas. El hecho de jugar un mundial y las mismas olimpiadas para mí fueron momentos que disfruté muchísimo. Ahora, también mis años en Cobreloa fueron buenísimos, así como también lo fueron esos años que estuve en el Santos de Brasil, en donde viví los mejores meses de mi carrera.
_ ¿Quedaron objetivos pendientes?
_ Me hubiera gustado jugar una Copa América. Tuve la posibilidad de estar solamente en una, pero estuve en la banca. Venía arrastrando la lesión todo el año 2001, por lo que Vargas (Sergio Vargas) fue el titular en la Copa América de Colombia.
_ ¿Pensó realmente que llegaría tan lejos en su carrera?
_ Nunca se me pasó por la mente. Mi sueño era jugar al fútbol, quería ser futbolista, me daba lo mismo el club. Yo no soy hincha de ningún club, solamente soy hincha de la selección.
No dimensioné lo que significaba haber quedado en O’Higgins. Para mí era radicarme ahí y nada más. Pero después se fueron abriendo otras puertas y me fui ganando espacios, me empecé a sentir reconocido por la gente. En resumen: me siento tranquilo con lo que hice.
UNA PREOCUPACIÓN CONSTANTE
_ ¿Qué opina acerca de la llegada de Marcelo Bielsa a la selección chilena?
_ Marcelo Bielsa es un entrenador que le puede aportar muchas cosas positivas a la selección. Ahora, el punto es ver si el jugador chileno puede asimilar su sistema, ya que él viene con otra mentalidad, viene con pensamientos y esquemas diferentes y a nosotros nos cuesta acostumbrarnos a otras costumbres futbolísticas.
_ ¿Cree que la nueva generación de jugadores está capacitada para llevar a Chile al próximo mundial?
_ Marcelo Bielsa tiene la capacidad, pero espero que los jugadores tengan el compromiso de asumir lo que él quiere para ellos. Es un cambio brusco, es un cambio rápido. Él llegó hace muy poco tiempo, por lo que el éxito del proceso va a pasar mucho por los jugadores.
_ Sabemos que Chile tiene jugadores ofensivos con exquisitas condiciones técnicas, pero al mismo eso no parece ser suficiente, puesto que al mismo tiempo Chile viene mostrando series falencias defensivas, puntualmente en los partidos contra Uruguay y Paraguay. ¿Qué otros elementos necesita la selección chilena para consolidar un rendimiento parejo y confiable como equipo?
_ La selección chilena va a consolidar un buen rendimiento a medida de que el campeonato nacional ande bien. Tengo entendido que se van a aumentar desde el próximo año los cupos de 4 a 7 jugadores extranjeros, lo que no es bueno para el fútbol chileno porque se le va quitando posibilidad al jugador chileno, especialmente a los jóvenes. El jugador chileno tiene condiciones, pero el problema va por un tema de actitud.
_ A propósito de la formación de los jugadores en Chile, ¿cuales son las virtudes y defectos del trabajo de cadetes en nuestro país?
_ El jugador chileno no tiene una buena formación de base y es en ese aspecto donde hemos frenado nuestro rendimiento futbolístico, porque somos muy mimados y nos gustan las cosas fáciles.
Yo creo que los jugadores de la selección están sintiendo lo que es trabajar con una buena estructura, porque el jugador chileno es muy “light”, no le puedes dejar una tarea y hay que vigilarlo constantemente para que las cosas funcionen.
_ ¿Cree que las sociedades anónimas deportivas son la única solución para que los equipos profesionales logren una solidez económica e institucional?
_ Sí, la sociedad anónima es lo más correcto. Hay un ordenamiento para los clubes, hay una responsabilidad para los dirigentes y una tranquilidad para los jugadores.
_ ¿Qué opinión le merece la gestión de Harold Mayne-Nicholls como presidente de la ANFP?
_ Es una persona creíble, seria y transparente. Es un hombre que le hará bien al fútbol chileno.
_ ¿Qué aspectos debe mejorar el fútbol chileno para que pueda alcanzar logros importantes?
_ La base son los cadetes. En los primeros años de un jugador la formación debe ser muy minuciosa.
_ ¿Pero los problemas formativos en Chile pasan más por lo económico o por la mala calidad formativa de los clubes?
_ Yo creo que el problema pasa más por la calidad de los jugadores.
_ ¿Clasificará Chile al próximo mundial?
_ Lo encuentro difícil. Es que ya se dejaron escapar puntos importantes con Paraguay, además que creo que va a levantar cabeza Ecuador y va a complicar a Chile. Venezuela también creo que está por encima de nuestra selección y eso quedó demostrado en las clasificatorias pasadas.
Es un tema complicado, es complicado que la gente vuelva a creer que se pueda alcanzar un nuevo mundial y que la selección tenga un rendimiento confiable.
BAJO EL PÓRTICO
_ ¿Cuál es la historia de sus apodos?
_ A mí me colocaron “Simpson” los jugadores de Universidad Católica. Ahora, “cabeza de muela” me lo colocó Reimundo Tupper.
La gente se enteró de mis apodos cuando di una entrevista, y cuando Eduardo Bonvallet empezó a usar mis apodos de manera despectiva se hicieron definitivamente conocidos.
_ ¿A qué equipo recuerda con más cariño?
_ A Cobreloa. Es que tengo buenos recuerdos de la institución, de la hinchada, de la gente, de mis compañeros. Obviamente también recuerdo con mucho cariño a Cobreloa por los títulos que gané allí, pero siempre recuerdo a la institución por el aspecto afectivo.
_ ¿Quién fue el mejor D.T que lo dirigió a usted?
_ Wanderley Luxemburgo, en Brasil. Era un tipo ganador y sólo trabajaba para ser campeón. Su mentalidad ganadora se la transmitía al plantel del Santos y eso nos gustaba mucho como grupo.
Yo trabajé tres años y medio con Manuel Pellegrini y el también tiene mucho de eso, tiene esa mentalidad ganadora. Pellegrini es tan bueno que sobrepasa lo que hay aquí en Chile. O sea, no podría dirigir en este momento a jugadores chilenos, porque la mentalidad de Manuel nos supera. Él está a nivel europeo.
_ ¿Cree que Manuel Pellegrini aceptará en el futuro dirigir a la selección chilena?
_ A mi me gustaría, pero sé que a él no le gustaría, porque él ya ha trabajado con los jugadores chilenos y él siempre dijo que dirigir a la selección chilena era “ponerse viejo antes de tiempo”.
_¿A qué equipo le gustaba enfrentar más?
_ Indudablemente Colo-Colo, aunque siempre hay una motivación especial enfrentar a los grandes, llámese Universidad Católica, Universidad de Chile o Colo-Colo.
Mi mentalidad es que cada partido es importante, yo crecí con esa forma de pensar. De hecho, le transmito a mis chicos acá que cada partido es fundamental, que en cada partido sumas tres puntos.
_ ¿Maradona o Pelé?
_ Maradona, porque a Pelé no lo pude ver jugar y a Maradona sí. He tenido a los dos muy cerca, los conozco a los dos, tuve la oportunidad de compartir en el Santos con Pelé, los dos merecen mi respeto, pero indudablemente me quedo con Maradona.
_¿Qué le llama la atención de Maradona?
_ Que es zurdo, y no hay zurdo que sea malo para la pelota.
_ ¿Brasil o Argentina?
_ Brasil. Siempre tuve la imagen de que los brasileños eran cagones, que jugaban para los costados, suavecito, que a los negros les metías la pierna y arrugaban. Pero cuando llegué a Brasil me di cuenta de que Chile está a años luz de Brasil.
_ ¿En qué equipo le hubiera gustado jugar?
_ En Universidad de Chile, porque me estuve probando cinco meses y no quedé. Cuando me había retirado del fútbol en el año 2005, me llamó Gustavo Huerta para jugar el 2006 por la “U”, pero los dirigentes no querían a un jugador que ya estaba prácticamente retirado. Me quedé con las ganas, además de que mi viejo es hincha de la “U”. Hubiera sido lindo jugar ahí.
_ ¿Qué otros deportes le gustan?
_ El rugby, porque es un deporte muy ordenado; lo encuentro muy disciplinado para jugarlo, donde se sacan la mierda y se pegan por 80 minutos y después salen todos como amigos, como si nada hubiera pasado.
_ ¿En qué otra posición del campo cree usted que hubiera sido exitoso como jugador?
_ De nueve. Yo me crié jugando adelante y por cosas del fútbol fui a dar al arco. Es que quería jugar, quería ser futbolista, no importaba en la posición. Cuando me di cuenta que en la selección infantil de Molina habían treinta delanteros y apenas dos arqueros me tiré al arco no más, porque sólo quería jugar. Entonces así, a los 14 años, empecé a jugar definitivamente como arquero y jugué toda mi carrera profesional en esa posición, aunque ahora juego en el fútbol amateur como delantero.
_ ¿Cuál es la virtud fundamental que tiene que tener un buen arquero?
_ Tiene que ser frío de mente, tiene que tener mucho equilibrio para jugar, pensar y ejecutar.
_ ¿Cuál es la hinchada a la que usted le tiene más respeto?
_ Si hay una hinchada que me produce admiración y respeto es la hinchada de la “U”.
_ ¿Cuál fue su mejor partido con la selección chilena?
_ Elegir un partido es difícil, pero yo hice muy buenos partidos en las olimpiadas. Todos mis partidos fueron correctos. Esos seis partidos fueron de los mejores que jugué por la selección chilena.
_ ¿En el fútbol importan más los puntos o los méritos?
_ Yo soy partidario de que el equipo que juega bien siempre va a tener más posibilidades de ganar.
_ Porque, por ejemplo, Chile atacó constantemente contra Paraguay, pero los paraguayos hicieron los goles y se llevaron los tres puntos.
Claro, pero el mérito de los paraguayos es que se plantearon muy bien defensivamente y fueron contundentes a la hora de marcar los goles.
_ ¿Quién fue el mejor jugador chileno de todos los tiempos?
_ Yo me quedo con Marcelo Salas e Iván Zamorano. Me han hablado muy bien de Elías Figueroa, de Alberto Quintano, del “Condor” Rojas, pero me quedo con la dupla “Za-Sa”, porque los conocí y jugué con ellos.
_¿Cuál es el peor momento que vivió como jugador?
_ Haberme lesionado en Argentina. Se había dado la posibilidad de jugar en Vélez Sarsfield, de sustituir a Chilavert, pero me lesioné en la pretemporada. Para mí fue fuertísimo eso porque jugué cinco partidos y los jugué lesionado. No fue una frustración completa pero me hubiera gustado jugar en Argentina y haber cumplido mi contrato con Vélez.
_ ¿Cuál es el mejor recuerdo que tiene como arquero?
_ Jugar por mi selección, sin lugar a dudas. En Molina siempre soñé con jugar en la selección. Con mis amigos siempre hablábamos de ir a ver jugar a la selección al punto de que no me importaba ir a ver jugar a Rangers o a Curicó Unido. Y de un día para otro aparecí en el Estadio Nacional cantando el himno nacional. Fue una sensación de locos.
_ ¿El himno nacional en Chile o en el extranjero?
_ En el extranjero, porque estás lejos de tu país y se siente más.
_ ¿Qué defensa lo protegió mejor?
_ La de Universidad Católica del 94 y del 95, porque trabajábamos todas las semanas con esa defensa. Con Manuel Pellegrini hacíamos una línea de cuatro, con dos volantes de contención, y los jugadores cumplían a la perfección sus funciones. De hecho en el 95 fuimos la valla menos vencida del torneo. Salía un defensa y su reemplazo lo hacía tan bien como el anterior, porque Manuel trabajaba muy bien ese aspecto táctico.
_ ¿Cuáles fueron sus mejores virtudes como arquero?
_ Fui un arquero muy tranquilo, sobrio.
_ ¿A qué delantero usted temía enfrentar en una cancha de fútbol?
_ Sin lugar a dudas Ronaldo. También Romario y Batistuta eran delanteros temibles, pero la calidad de Ronaldo es extraordinaria y a ningún arquero le gusta enfrentársele.
_ ¿Tuvo en algún momento ofertas de importantes clubes europeos?
_ Antes del mundial surgió una oferta del Chelsea, pero cuando el Chelsea no tenía el status de ahora. Estuve a punto de jugar en el Transor de Turquía, pero se metieron unos empresarios y arruinaron la negociación.
_¿En qué liga europea le hubiera gustado jugar?
_ En la liga española, porque es un fútbol bien jugado y no es tanto correr como en Inglaterra o como en Italia. Creo que la liga española tiene una mezcla del fútbol europeo con el fútbol sudamericano por la presencia de muchos jugadores de la región, lo que la hace una liga agradable para que el sudamericano juegue allí.
_ ¿Cómo percibe el fútbol europeo al jugador chileno?
_ Al fútbol europeo le gusta mucho el jugador chileno y en general le gusta el jugador sudamericano, pero los europeos piensan que el jugador sudamericano es generalmente flojo. Piensan que los jugadores sudamericanos somos de trotar veinte minutos, jugar una pichanga y nada más. Los europeos creen que para progresar en el fútbol hay que ser repetitivos en los entrenamientos, y al jugador sudamericano no le gusta eso.
_ En una palabra: ¿Qué fue lo mejor que le dio el fútbol?
_ Me dio una “familia”, me dio un entorno en el cual tuve muchos “hijos” en el fútbol, me dio muchos “hermanos” en el fútbol, me dio muchos “padres” en el fútbol.
Cuando yo me inicié en el fútbol, muchos futbolistas mayores me ayudaron a crecer como futbolista, a la vez que compartí buenos momentos con esos “hermanos” que tuve mientras fui jugador, y cuando me retiraba del fútbol fui el “padre” de muchos jugadores jóvenes que recién se iniciaban en el fútbol. Con todos ellos tengo un contacto muy cercano y por eso te digo que el fútbol me dio eso, una “familia”.
El sudador!
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